Puente de Piedra
Aquí nos encontramos ante el Puente de Piedra de Nájera, una estructura que desde el siglo XVI une las dos orillas del río Najerilla. ¿Te has preguntado alguna vez cómo sería construir un puente así sin la tecnología moderna? La respuesta está en la impresionante arquitectura de piedra que hasta hoy se mantiene sólida y funcional.
El puente está formado por varios arcos que no solo tienen un efecto estético, sino que sobre todo garantizan la estabilidad necesaria. Estos arcos soportan el peso y resisten la fuerza del río que atraviesa este valle. A lo largo de los siglos, el puente ha sido restaurado en varias ocasiones para cumplir con las exigencias actuales, un verdadero ejemplo de construcción sostenible mucho antes de que la sostenibilidad se pusiera de moda.
Lo que hace especial a este puente no es solo su función como unión entre barrios, sino también su papel como patrimonio cultural. Cuenta la historia de Nájera y de la región de La Rioja, plasmada en piedra. Si miras a tu alrededor, no solo verás el puente, sino también los edificios históricos que rodean el valle del río, una pieza viva de la historia que puedes tocar.
Imagina cuántas personas han pasado por aquí a lo largo de los siglos, cuántas historias han ocurrido en este puente. Es un lugar donde el pasado y el presente se encuentran. Por eso vale la pena detenerse un momento, empaparse del ambiente y quizás sacar la cámara, porque la vista desde aquí realmente merece la pena.
Muy cerca encontrarás el Monasterio de Santa María la Real, otro tesoro histórico que impresiona con su arquitectura y arte. Así que el puente no es solo un paso sobre el río, sino también una puerta a otros puntos destacados de la ciudad.
Así que la próxima vez que cruces un puente, recuerda: detrás de cada piedra hay una historia, y aquí en Nájera puedes sentirla de verdad.




